lunes, 13 de abril de 2015

LA MALDICIÓN

No te acerques mucho a mi porque me gustas y puedo lastimarte. Se que suena estúpido, y muchas veces yo misma me pregunto porque no puedo cambiar, porque cuando conozco una persona como tú, tan bella, tan inmensamente bella terminamos así.


Recuerdo la primera vez que tomaste mi mano, no podía creer que estuviéramos acariciando nuestros dedos, tus manos suaves y largas, quería que ese momento durara para siempre. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario